El éxito de un negocio tiene mucho que ver con el proceso de toma de decisiones que tenga a sus espaldas. De hecho, nadie alcanza el éxito tomando malas decisiones.
¿Te gustaría tomar mejores decisiones en tus proyectos de emprendimiento? En este artículo veremos cuáles son las etapas del proceso de toma de decisiones así como algunos consejos básicos para mejorar la toma de decisiones en una empresa.
Sin embargo, antes de ver cuáles son los pasos para la toma de decisiones, es importante recordar qué es el proceso de toma de decisiones y cuál es su importancia.
Qué es el proceso de toma de decisiones
El proceso de toma de decisiones es el conjunto de pasos que toma una empresa para elegir una opción después de que ha identificado una decisión, ha recolectado información y ha comparado diversas alternativas.
El proceso de toma de decisiones tiene una gran importancia para las empresas y algunos de sus principales beneficios son los siguientes:
- Mejora tus procesos de planeación estratégica.
- Optimiza los recursos y el capital de tu negocio.
- Permite que tu negocio pueda crecer.
- Mejora la motivación y el compromiso entre tus empleados.
- Genera espacio para la innovación.
- Te ayuda a controlar mejor los cambios en tu industria y sector productivo.
Ahora que ya sabemos qué es el proceso de toma de decisiones, es el momento de entrar a ver cuáles son los más importantes pasos para tomar una decisión.
7 pasos para la toma de decisiones
No todas las decisiones que tomamos son iguales. Sin embargo, existen una serie de pasos para tomar una decisión que son ampliamente considerados como una guía ideal para estructurar las decisiones que tomamos. Veamos cuáles son estos pasos del proceso de toma de decisiones.
1. Identifica el tipo de decisión a tomar
El primer paso que tienes que dar para tomar una buena decisión consiste en identificar claramente el tipo de decisión que quieres tomar. De hecho, y aunque suene un poco obvio, este es uno de los más importantes pasos del proceso de toma de decisiones.
Para lograr este objetivo, te aconsejamos responder las siguientes preguntas:
- ¿Cuál es el problema que quieres resolver?
- ¿Cuál es el objetivo que deseas alcanzar una vez que implementes tu decisión?
- ¿De qué forma medirás el éxito de la decisión tomada?
Si respondes a estos interrogantes de manera clara, tus posibilidades de identificar claramente la decisión a tomar serán bastante altas.
2. Reúne información relevante
Una vez tengas claridad con respecto al tipo de decisión a tomar, es importante recolectar información que te permita tomar una decisión informada. Para llevar a cabo esto, puedes comenzar recolectando información al interno de tu organización sobre todo si ya se han tomado decisiones similares en el pasado.
Además de la información interna, es importante que obtengas información externa como, por ejemplo, a través de un estudio de mercado o hablando con colegas de otras empresas que hayan afrontado un problema similar. Este proceso te ayudará a identificar posibles soluciones a tu problema.
3. Identifica las opciones y alternativas
Después de haber recolectado y analizado toda la información pertinente, será posible identificar más de una posible solución al dilema que estás tratando de resolver. Por ejemplo, si quieres expandir tu actividad a otros mercados e hiciste un análisis de mercado, seguramente podrás identificar fácilmente cuáles son las posibles opciones a considerar.
4. Analiza la evidencia
Una vez has identificado las alternativas, solo tienes que proceder a compararlas a través de un análisis en el que puedas ver claramente cuáles son las ventajas y desventajas que ofrece cada alternativa.
Utiliza la información recolectada y tus emociones para imaginar lo que podría ocurrir si llevas a cabo cada una de las posibles alternativas y evalúa si la necesidad que ha sido definida en el primer paso del proceso de toma de decisiones se logra resolver a través de cada alternativa.
Mientras haces esta comparación es importante que vayas viendo cuál es la que mejor responde a los objetivos que te has trazado y cuál es aquella que se ajusta mejor a la misión, visión y valores de tu empresa.
5. Elige una de las opciones
En este paso solo tienes que elegir una de las alternativas que estabas comparando en el paso anterior. Es más, puede también ser posible que la decisión termine siendo una combinación de alternativas.
De hecho, una de las mejores formas de reforzar el proceso de toma de decisiones consiste en pensar de manera creativa. Por esta razón te invitamos a que trates tus alternativas con una buena dosis de flexibilidad.
6. Pon en marcha tu decisión
En este paso, se trata de pasar de la idea a la acción. La decisión ha sido tomada y este es el momento de ponerla en marcha.
7. Evalúa la decisión tomada
La última de las etapas de la toma de decisiones no deja de ser también muy importante. De hecho, en esta etapa debes evaluar si los resultados que has obtenido con tu decisión han sido capaces de resolver la necesidad identificada en el primer paso del proceso.
En caso de que no haya sido así, sería conveniente considerar repetir algunos de los pasos del proceso para llegar a una nueva decisión. Por ejemplo, podrías tratar de recolectar información más precisa a través de encuestas de satisfacción o explorar otras alternativas previamente no consideradas.
Cómo mejorar el proceso de toma de decisiones
Conocer las siete etapas del proceso de toma de decisiones es un buen punto de partida para comenzar a optimizar dicho proceso. Sin embargo, nos gustaría compartir contigo algunos consejos adicionales que esperamos te ayuden a optimizar dicho proceso aún más.
Estructura el proceso de toma de decisiones
Uno de los errores más grandes que se cometen con respecto a la toma de decisiones en una empresa radica en que muchas decisiones no se toman siguiendo un proceso de pasos como el que describimos antes.
Por esta razón, si quieres mejorar la gestión de tu empresa y las probabilidades de que te puedas convertir en un emprendedor exitoso, te aconsejamos que implementes los siguientes cinco pasos dentro de tu proceso de toma de decisiones.
1. Conforma un equipo competente
Cuando se trata de la toma de decisiones en una empresa, una de las principales funciones que tiene un mánager consiste en formar un equipo de personas que sean apropiadas para el tipo de decisión que se quiere tomar.
Para esto, te aconsejamos que definas el tipo de bases que necesita tu decisión y elijas a las personas con las habilidades y la experiencia necesaria para responder a tales bases. Por ejemplo, si necesitas tomar una decisión a nivel de estrategia de precios, seguramente será necesario que la gente encargada de ventas y finanzas haga parte del proceso de toma de decisiones.
Además de elegir a personas cualificadas para el proceso, es importante que les asignes un tipo de participación específica dentro del mismo. Si cada persona sabe que se espera de ella en el proceso será más fácil darle un enfoque claro desde el inicio.
2. Ten en cuenta la criticidad y la urgencia de la decisión
El proceso de toma de decisiones en una empresa debe tener en cuenta los siguientes dos factores:
- La criticidad de aquello que está tratando de definirse.
- La urgencia con la cual se debe definir.
Definir estos factores es un asunto sumamente importante ya que te permitirá entender exactamente el tiempo que tendrás a disposición para llevar a cabo la decisión.
3. Promueve la discusión y controla las dinámicas del grupo
Sin importar cuál sea el tipo de liderazgo que define tu gestión, es importante que promuevas la discusión y el debate con las personas que has elegido para participar en el proceso de toma de decisiones.
Igualmente, es importante controlar las dinámicas del grupo. En particular, es importante cerciorarse de la forma en que fluye la discusión y determinar el número de interacciones cara a cara que son necesarias llevar a cabo dentro del proceso.
4. Cerciórate que la decisión cuenta con el respaldo adecuado
Tomar una buena decisión es solo una parte del proceso. En realidad, lo más importante es que una vez que se tome una decisión existan los grupos y el apoyo que necesita la decisión para funcionar.
Por esta razón, es muy importante que te cerciores que el proceso para la toma de decisiones cuente con los siguientes tres elementos:
- Objetivos compartidos.
- Opciones alternativas que hayan sido evaluadas rigurosamente.
- Métodos claros para analizar las consecuencias de las decisiones.
5. Refuerza la decisión a través de buena comunicación
Una vez se opta por tomar una decisión, es importante cerciorarse que dicha decisión sea capaz de alinear a todo el grupo ya que esto ayudará mucho en términos del compromiso que los miembros del grupo tendrán con respecto a la decisión tomada.
Para lograr esto, es fundamental que comuniques y expliques tu decisión de manera clara. Una de las mejores formas de hacerlo consiste en anunciar la decisión final haciendo lo siguiente:
- Reconociendo las diferencias de opinión que se encontraron en el proceso, y
- Garantizando que las inquietudes que no han sido incorporadas en la decisión final serán tenidas en cuenta si la implementación de la decisión final así lo exige.
3 consejos prácticos para tomar mejores decisiones
Para terminar este artículo, nos gustaría compartir contigo tres simples consejos que esperamos te ayuden a mejorar el proceso de toma de decisiones. Para esto es importante entender que dicho proceso puede ser mejorado si afinas tus habilidades para hacer predicciones y emitir juicios.
1. Cuestiona tus certezas
El exceso de confianza es uno de los grandes obstáculos que podemos encontrar en el proceso de toma de decisiones. Para evitar caer en dicho error, es importante cuestionar nuestras certezas.
Si piensas que una decisión A produce necesariamente un resultado B, podrías estar pecando por exceso de confianza. Por el contrario, si pones en discusión tal idea, estás creando la posibilidad de cuestionar la lógica de tu hipótesis añadiendo un ángulo diferente a tu análisis.
Si logras afinar este tipo de actitud, estarás haciendo una buena inversión no solo a nivel de las decisiones que tomas sino también a nivel de tu inteligencia emocional.
2. Evalúa la frecuencia
Mejorar la capacidad de hacer predicciones representa una gran ayuda en la toma de decisiones. Una de las mejores formas de mejorarla consiste en hacer una simple pregunta: ¿con qué frecuencia ocurre?
Por ejemplo, si estás pensando en invertir en una startup, una pregunta que podrías hacer sería la siguiente ¿con qué frecuencia fracasa o tiene éxito una startup? Resolver este tipo de preguntas puede ayudarte bastante cuando estés recolectando información relevante para tomar tu decisión.
3. Invierte en probabilidad
Varios estudios han llegado a la conclusión de que una inversión académica básica en probabilidad hace que las personas mejoren su capacidad de hacer predicciones y eviten caer en prejuicios de tipo cognitivo.
Es más, una inversión de este tipo puede ayudarte a reforzar los dos consejos que mencionamos antes. Si mejoras tu capacidad para pensar en términos de probabilidad, podrás expresar de manera más clara tus incertidumbres y cuantificar mejor la frecuencia de que algo ocurra.
Por esta razón, si tienes la posibilidad de invertir en un curso de probabilidad o hacer algún tipo de ejercicios que te ayuden a mejorar esta capacidad, seguramente le estarás aportando una buena herramienta a tus propias decisiones.
Con esta sugerencia, hemos llegado al final de este artículo. Esperamos que todos estos consejos sobre la toma de decisiones en una empresa te sirvan para tus propios proyectos profesionales. ¿Quieres más consejos? ¡Suscríbete a nuestro blog ahora!